Translate

jueves, 12 de marzo de 2015

Miércoles 11.03.15 Ohrid (Macedonia) Tras una noche en la que no paró la lluvia, desmonto la tienda, empapada, con las manos ateridas de frío. Esta lluvia con la que inicio el día será nieve en el paso fronterizo que une/separa Albania con/de Macedonia y que dista siete kilómetros de mi dormitorio y no se cuantos metros de altura de diferencia de cota.

Tan pronto comienzo a rodar por el país voy notando las diferencias. Más vegetación, menos basura y construcciones mucho más cuidadas. Ya al cruzar las primeras poblaciones se puede observar una atención y cuidado en sus espacios comunes así como gusto en su planificación urbana, cosas de las que Albania carece totalmente.

Primero cambiar moneda, poca, ya que pretendo, si el tiempo lo permite, cruzar el sur del país en tan solo un par de jornadas.

Me detengo a primera hora de la tarde, cuando encuentro una zona cubierta donde intentar poner a secar la tienda, cosa complicada con la cantidad de humedad en el ambiente, la falta de sol y su baja temperatura. De cualquier modo, dormiré bajo techo y sin montar la tienda, tan solo el doble techo apoyado en la bici, en un intento de retener en lo posible el calor y lograr cierto grado de intimidad. Así dormí mi primera noche en Albania y alguna que otra en Portugal y con solo disponer de una pared, el resultado puede ser realmente confortable.

Entro por curiosidad en un supermercado, la sorpresa es grata, ante la escasez de oferta que vengo padeciendo estas dos últimas semanas, voy recorriendo estantes y calculando los precios en euros, la moneda local me da 61 unidades por un euro, ya lo hice antes ante la puerta de unos bares y veo que aquí las diferencias están más equilibradas. Bares más caros, levemente, y supermercados no tan caros, levemente también, de modo que iré alternando ambos modos de nutrirme, según me de.

Esta zona del país esta habitada por muchos albaneses y mañana encontraré a griegos. Parte de los albaneses llegaron refugiados por la guerra de Kósovo, y se establecieron cerca de su país. Leí no se por donde de la influencia eslava por migraciones búlgaras a lo que hay que sumar los movimientos de población de cuando esto era parte de Yugoslavia. Una cosa que noto en falta es que no recurren al italiano y directamente establecen comunicación en ingles, en el que puedo construir frases pero apenas lo entiendo cuando me hablan. Las indicaciones de carreteras o en sus ciudades están con el nombre en macedonio que no conozco y escritas en cirílico que aún lo comprendo menos. Por fortuna, tras cambiar moneda, me hice con un plano, por el equivalente a un euro, en donde todo esta escrito en macedonio y cirílico. Miro la señal de carretera y tras un momento puedo localizar el lugar en el plano, si lo han puesto en el plano.

En el supermercado compré leche kosovar y un cuaderno servio. En una panadería, un cruasan, descomunal, y que no sabe a cruasan.


Me sucedió hace unos días también y no lo mencioné. Misma pregunta. Fue hoy en la frontera y me lo preguntó un guardia albanés, ¿por que viajas en bici?, ¿por que por Albania?. Desconcertado, se le ve en una cara, que no deja de hacer señales de negación, no comprende ni este modo de viajar ni que a nadie le de por visitar un país en donde una buena parte de los que lo habitan a buen seguro le encantaría dejar atrás. No tengo respuestas para el.

No hay comentarios:

Publicar un comentario